- Ricardo o “Tamara” regresaba de su jornada de trabajo en Nopala para incorporarse al siguiente día a laborar en el hospital de Pochutla
Raúl Laguna
SAN PEDRO POCHUTLA. – La noche del viernes 13 de diciembre, Ricardo Zuñiga, mejor conocido como “Richi” o “Tamara”, fue brutalmente asaltado y asesinado tras retirar dinero de un cajero automático en el interior del Hospital General de San Pedro Pochutla, donde prestó sus servicios como enfermero durante varios años.
El trágico incidente ocurrió en un lugar solitario, frente a la unidad deportiva de esta población. Ricardo, originario de la Villa de San Blas Atempa, fue apuñalado por uno o más agresores y, debido a la gravedad de las heridas, perdió la vida minutos después del ataque.
De acuerdo con información extraoficial, esa noche, “Tamara” venía de la población de Santos Reyes Nopala, donde se desempeñaba como enfermero en un hospital de esa comunidad. Al llegar a San Pedro Pochutla, pasó al hospital de esta ciudad, donde también prestaba sus servicios los fines de semana, para saludar a sus compañeros y aprovechó para retirar dinero de un cajero automático ubicado en la institución.
Minutos después de las 9 de la noche, “Tamara” salió del hospital con dirección a su domicilio; sin embargo, a unos 100 metros de allí, en un lugar solitario frente a la Unidad Deportiva, fue interceptado por uno o más sujetos que lo asaltaron. Se presume que pudo haber forcejeado con sus agresores, lo que originó que lo hirieran de gravedad con un arma punzo-cortante en el cuello.
Entre los comentarios que se escuchan en la población consternada por el asesinato, un doctor que pasó por el lugar o que fue avisado, logró pedir apoyo y lo trasladaron aún con vida al hospital, donde sus signos vitales dejaron de latir.
Tras la muerte de “Tamara”, trascendió que elementos policiacos lograron la detención de dos personas a quienes, supuestamente, les encontraron una mochila que le pertenecía a la víctima. Hasta el momento se desconoce la situación jurídica de los detenidos.
Compañeros de trabajo, pacientes y residentes de San Pedro Pochutla han expresado su conmoción y tristeza ante el fallecimiento de quien era conocido por su dedicación y calidez humana. “Tamara” se había ganado el aprecio de la comunidad gracias a su desempeño profesional y su carácter amable.
Mientras tanto, las investigaciones periciales y judiciales por el artero homicidio están en mano de las autoridades correspondientes, quienes abrieron un legajo de investigación para esclarecer la muerte y dar con el paradero de los culpables